Sin las respectivas licencias, en
Tijuana inician construcción de edificios públicos o privados con el aval de la
autoridad municipal que hasta seis meses después de que la obra es erigida
libera el permiso respectivo. Edificios Cosmopolitan de David Guakil y el
COBACH semi militarizado –el cual se asienta en una zona dictaminada como
inestable-, son ejemplo de ello
“En Tijuana, ninguna
construcción se realiza sin antes contar con la licencia de construcción”,
sostuvo el titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología (SDUyE),
Ricardo Lomelín Clapera.
El funcionario afirmó que
para ello la Dirección de Administración Urbana realiza las inspecciones y
aplica las multas correspondientes.
Cuestionado en su momento, el
funcionario anotó que tanto la empresa Cosmopolitan Group, propiedad de David
Saúl Guakil, como el COBACH semi
militarizado que se construye en el Fraccionamiento Jardines de Agua Caliente,
sí cumplen con todos los requisitos.
No obstante, la realidad de
Tijuana y los propios empresarios de la construcción contradicen su
aseveración.
COBACH MILITARIZADO, SIN LICENCIA Y EN ZONA INESTABLE
Sin contar con las licencias
de construcción respectivas y sin que a la fecha en la Dirección de
Administración Urbana (DAU) se tenga oficialmente un proyecto ejecutivo de la
obra, desde finales de 2017 se construye una preparatoria semi militarizada,
bajo el sistema de Colegio de Bachilleres de Baja California (COBACH).
El plantel se edifica con una
inversión de 35 millones de pesos de recurso público, principalmente aportado
por la Federación, y en predios donados por el gobierno del Estado y el
Ayuntamiento de Tijuana.
El problema es que dichos
predios se ubican en el Fraccionamiento Jardines de Agua Caliente, asentamiento
con notable presencia de deslizamientos y asentamientos derivados de la estabilidad
precaria de la zona, fenómenos que, de acuerdo a un estudio realizado por el
Centro de Investigación Científica y de educación Superior de Ensenada
(CICESE), están asociados a la gravedad y al tipo de relleno, por lo que el
organismo recomendó “no aumentar la carga al terreno”.
El estudio geológico del
Fraccionamiento Jardines de Agua Caliente, lo realizó el CICESE en 2011,
después de que en el polígono del fraccionamiento edificado por Grupo Melo
registrara hundimientos, agrietamientos y fracturas en viviendas y vialidades,
lo que derivó incluso que Protección Civil Municipal colocara engomados rojos
para advertir como inhabitables algunas inmuebles.
El terreno de 10 mil metros
cuadrados en donde se edifica el COBACH semi militarizado se ubica al este, en
el límite topográficamente más bajo del fraccionamiento “y corresponde
básicamente a una zona de relleno que, a su vez, coincide con las pendientes
más fuertes”, se lee en el estudio.
Es en esta zona donde los
expertos del CICESE mapearon 17 grietas, la mayoría en la privada De La
Higuera, de La Mora y Castaño, calles que rodean el predio del plantel.
Si bien “en la Zona Este solo
se observaron tres hundimientos, dos están prácticamente en el límite de corte
y de relleno…”, es decir, en el punto dónde se erige la institución educativa
que prevé abrir sus puertas al arranque del inicio escolar 2018-2019.
Peor aún, los especialistas
advierten que ante escenarios que contemplen las sismicidad de la región, el
terreno es de una “estabilidad precaria”.
No obstante al dictamen del
CICESE y a la oposición de los vecinos que habitan las privadas que circundan
el predio de lo que será la nueva preparatoria, su construcción continúa,
asegurando el Coordinador de COBACH en zona costa, Javier Santillán, que sí
se cuentan con los estudios
correspondientes que “garantizan la estabilidad del terreno”.
A medio año de iniciada la
obra, ZETA solicitó vía la unidad de Transparencia del XXII Ayuntamiento de
Tijuana copia de la licencia de construcción, movimiento de tierra, uso de
suelo, así como del proyecto ejecutivo, obteniendo como respuesta de la
Directora de Administración Urbana (DAU), Magdalena García Tafoya, que “después
de una búsqueda exhaustiva”, no se encontró registro de esos requisitos ni en
los archivos del Departamento de Urbanización, Departamento de Usos de Suelo.
No obstante, advirtió que “en
el Departamento de Edificaciones sí se cuenta con solicitud de licencia de
construcción” y para estar en condiciones de emitir las copias solicitadas en
versión pública advirtió un pago de 576.50 pesos.
No obstante, al acudir a
realizar el pago para obtener las referidas copias, en el sistema del
Departamento de Edificaciones no se localizó ni solicitud alguna ni ningún tipo
de documento que diera cuenta oficial de la construcción del COBACH semi
militarizado que se erige en el Fraccionamiento Jardines de Agua Caliente.
NO HAY MANERA DE ESPERAR LIBERACIÓN DE LICENCIA:
GUAKIL
“El gobierno es el que tiene
que ajustar sus tiempos, no yo”, advirtió el empresario metido a político,
David Saúl Guakil.
Su máxima la ha llevado a la
práctica; como muestra ponderó la construcción de un complejo de departamentos
que erige su empresa Cosmopolitan Group en la Zona Centro, sobre la Avenida
Revolución y calle 9, “hace un año y medio inició Distrito Revolución y la
licencia de construcción me la dieron hace poco más de 4 meses”.
En efecto, el complejo de 66
departamentos inició edificación desde mediados de 2017 sin contar con la
licencia de construcción correspondiente, la cual le fue liberada el 22 de
diciembre de ese año, cuando la obra tenía edificados 6 pisos.
De la irregularidad culpó al
propio gobierno: “No soy yo, es el sistema, los permisos se van requiriendo,
pero un trámite es de 65, otro de 45, 60 días para tener las licencias de
impacto urbano, impacto vial, certificación de bomberos; antes de llegar a la
licencia –de construcción-, son como 20 permisos, 20 trámites que se tienen que
hacer”.
Si bien, anotó que las reglas
y los reglamentos se tienen que cumplir “nosotros no construiríamos nada si no
respetamos las reglas y los reglamentos”, admitió que no todas las ordenanzas
se cumplen desde el inicio de la obra, sino que se van solventando en el
transcurso de la misma:
“Se respetan en el inter, hay
cosas que se cumplen en el inter pero hay cosas que se cumplen de inicio que
son las más importantes, como: que el predio no tenga ninguna contaminación,
que tengas un análisis de que el predio aguanta el peso de un edificio; estudio
sísmico, geofísicos que la autoridad pide para cualquier movimiento”.
Por ello es que iniciado el
trámite para obtener los permisos correspondientes, la edificación de los
proyectos arranca, solventando las inconsistencias al mismo tiempo que la obra
avanza ya que, desde su punto de vista, “todo es corregible, si algo sale
insolvente se corrige”.
Para el empresario “no hay
manera de esperar hasta que salga la licencia de construcción”.
Particularmente, dijo, por los 3 mil empleos que sus edificaciones actualmente
generan, 200 de ellos para migrantes haitianos.
Estoy a favor de todos los
reglamentos pero también de que todos los requerimientos se den de manera más
rápida, añadió, para luego subrayar: “cuando la ciudad está dormida puedes
esperar los 18 o 20 meses –que expuso puede demorar la liberación de una
licencia-, ahorita la ciudad no está dormida, hay una demanda tremenda en el
que se tienen que cambiar los reglamentos para que las licencias se den de
manera más expedita”.
Además, “no hay manera de que
dejemos de construir porque estamos construyendo en propiedad privada, porque
la Ley me permite construir en propiedad, lógicamente tenemos que respetar los
reglamentos”.
Para justificar su
contradictoria apreciación, Guakil expuso que las edificaciones, al menos las
de su propiedad, aunque sin licencia de construcción, sí inician con otro tipo
de licencias, “hay licencias provisionales de movimiento de tierra para
construir cimentación, hay toda una ruta…”.
OBRAS IRREGULARES POR FALLA DEL MUNICIPIO: CICTAC
A decir del ingeniero José
Luis Almanza, integrante del Consejo Directivo del Colegio de Ingenieros
Civiles de Tijuana (CICTAC), el hecho de que en el municipio se edifiquen obras
irregulares –sin el total de las licencias correspondientes-, de debe a fallas
del municipio, al no imponer las sanciones y multas correspondientes.
La propia autoridad “fomenta
la mala cultura de iniciar primero la construcción y luego realizar los
trámites, vicios que se observan tanto en obra de la iniciativa privada como
pública”, dijo.
Si bien, indicó que en el
proceso de liberación de permisos la autoridad municipal es muy lenta, sostuvo
que la demora no alcanza los 6 meses, como lo afirma Saúl Guakil: “Sí son
lentos pero no tanto; si tarda ese tiempo es porque existe alguna
irregularidad”.
Descartó que se puedan
iniciar edificaciones con permisos temporales, “permisos temporales solo
existen para movimiento de tierra”.
Anotó que como colegio
plantean la agilización de los trámites, pero también el cumplimiento de los
requisitos básicos que garanticen la calidad de las construcciones, que los
proyectos estén técnicamente solventes, para evitar contingencias, porque un
problema técnico se vuelve un problema social, como el caso de Lomas del Rubí”,
concluyó.
(SEMANARIO ZETA/ Ezenario/ Isabel Mercado/ Lunes, 23 Abril, 2018 12:00
PM)