¿Cómo
se elegirá al candidato? ¿Cuál será el proyecto de gobierno? ¿Incluye las 9
gubernaturas? El tiempo es el principal obstáculo que tiene el Frente Amplio
Opositor, que impulsa la dirigencia del PAN y el PRD, para competir en alianza
con otros partidos en la elección presidencial del 2018
La
construcción de este Frente Amplio se remonta más allá de la declaración de
Ricardo Anaya y Alejandra Barrales, líderes del PAN y el PRD, cuando
manifestaron la intención de sus partidos de trabajar en ese frente común.
Desde
hace más de dos años, Gustavo Madero, del PAN, y Guadalupe Acosta Naranjo, del
PRD, comenzaron a trabajar en la construcción de un frente amplio que incluyera
a estas dos fuerzas políticas en la elección del 2018.
Su
intención ha sido trabajar primero sobre los cimientos de la conformación de
este frente opositor, creando un proyecto de nación conjunto; pero ahora el
tiempo apremia.
Si
pretenden volver realidad la idea de un pacto más allá de lo electoral, estos
dos partidos y quienes se sumen, deberán hacer un esfuerzo sobrehumano por
empatar agendas, propósitos e ideas de país en cuatro meses, antes de que sea
tiempo de establecer quién será su candidato o candidata.
Esto
también representa un riesgo para el frente. Para nadie es un secreto que tanto
en el PAN como en el PRD ya hay una variedad de aspirantes a la candidatura
presidencial de sus partidos.
En
el Frente opositor habrá una guerra no solo ideológica, sino también de egos.
En
el PAN, es conocido que los aspirantes son Margarita Zavala, Rafael Moreno
Valle y Ricardo Anaya; y a ellos se han sumado otros personajes, como Ernesto
Ruffo Appel, Juan Carlos Romero Hicks y Luis Ernesto Derbez.
En
el PRD están Miguel Ángel Mancera –quien no está afiliado al partido-, Silvano
Aureoles, Graco Ramírez y la revelación más reciente, Juan Zepeda.
Por
eso, Guadalupe Acosta Naranjo y su corriente, los Galileos, han pedido que se
considere la posibilidad de postular a un candidato ciudadano que dé la
legitimidad que corresponde a un Frente de esas características.
“Sin
coartarle a nadie el deseo a aspirar y participar, consideramos que lo ideal
sería que la candidatura presidencial la tuviera una ciudadana o ciudadano que
no perteneciera a ninguno de los institutos políticos. De esa manera
conseguiríamos romper la estrategia del régimen de fragmentar el voto opositor
con una fórmula que en los hechos juntaría a una coalición de partidos con un
candidato independiente.
“En
lugar de dispensar la indignación con el status quo y el ánimo de cambio de la
sociedad mexicana, la concentraríamos para garantizar el triunfo y, más
importante, la transformación del país”, han expuesto los Galileos.
¿Será
posible que los políticos renuncien a sus aspiraciones por el objetivo común?
Está por verse.
LA META: EL 2018
El
próximo año se llevará a cabo una de las elecciones más complejas de la
historia, no solo por su tamaño, sino por las circunstancias en que se llevará
a cabo.
No
solo se elegirá al nuevo presidente de la República, sino a los 500 nuevos
diputados federales y 128 nuevos senadores.
Los
estados de Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y
Yucatán elegirán a su nuevo gobernador. En la Ciudad de México se elegirá al
Jefe de Gobierno.
Habrá
también elecciones locales en 30 entidades –salvo en Baja California y
Nayarit-. Algunos de ellos votarán por alcaldes, por diputados locales o por
ambos.
En
27 estados se renovará el congreso local, para lo que se elegirá a 984
diputados. Habrá nuevos ayuntamientos en 25 estados, en los que participarán 2
mil 226 municipios –contando los 417 de Oaxaca que se rigen por usos y
costumbres-. Además, en la Ciudad de México se elegirá a los alcaldes de las 16
delegaciones.
El
próximo año será el primero en que pueda aplicarse la reelección a los alcaldes
y diputados locales que fueron electos hace tres años, por lo que habrá muchos
que hoy estén en funciones que busquen permanecer en el cargo.
También
habrá nuevas reglas para la paridad de género y otras de comunicación política,
como la norma que limitará la aparición de los presidentes de los partidos en
los spots.
La
elección del 2018 llegará en medio de un severo cuestionamiento a las
autoridades electorales, tanto locales como nacionales, lo que impacta
directamente en la confianza de los ciudadanos.
LO QUE ESTARÁ EN JUEGO
El
próximo año los mexicanos irán a las urnas a elegir:
1 Presidente de la República
1 Jefe de gobierno (CDMX)
984 Diputados locales
500 Diputados federales
8 Gobernadores
25 Ayuntamientos
128 Senadores
27 Estados renovarán Congreso local
16 Alcaldes para las delegaciones de la
CDMX
EL PACTO POR MÉXICO
Durante
los cinco últimos años, el papel de la Oposición en el gobierno del presidente
Enrique Peña Nieto ha sido contradictorio.
Por
un lado, el PAN y el PRD se han aliado en varios estados con fines meramente
electorales; por otro, han apoyado al Ejecutivo en sus reformas estructurales.
El
gobierno del presidente Enrique Peña Nieto tuvo un primer intento de gobierno
de coalición con la firma del Pacto por México, que reunió al PAN y al PRD
después de la polarización que tuvo el país en el sexenio de Felipe Calderón.
Pedro
José Zepeda, investigador del Instituto Belisario Domínguez, sostiene que el
Pacto por México ha sido el acuerdo político más importante que se haya logrado
en décadas, pues sacó adelante varias reformas estructurales que llevaban décadas
en el estancamiento.
Sin
embargo, el rompimiento del Pacto tuvo algunos efectos que pasarán la factura
todavía durante algún tiempo.
(DOSSIER POLITICO/ Tomado de: Imelda
García / Reporte Índigo/ 2017-07-03)