En un ensayo de su propia pluma, Sergio Aponte Polito,
General de División del Estado Mayor del Ejército mexicano, ex Presidente del
Tribunal Militar y ex Comandante de la II Región Militar, denuncia corrupción,
habla de traición contra México y expone su tristeza por el aumento de la
gasolina. Este texto se reproduce con autorización del autor y del Semanario
Zeta, asociado editorial de SinEmbargo.
El General de División dice
en un apartado que llama, simplemente, “tristeza”:
“…Tristeza, por el uso de
recursos financieros para otros
propósitos ajenos a Pemex, principalmente de tipo político; robos de
combustibles que considero son distractores, propiciados en muchas ocasiones
por gente de alto nivel de esta empresa,
que sabe los lugares, hora y clase de combustible que va a pasar por
determinado lugar para ser sustraído
ilegalmente por bandas de delincuentes; también existe el sindicato de Pemex,
que ha sido nefasto por la corrupción y enriquecimiento en el que han incurrido
líderes como Joaquín Hernández Galicia ‘La Quina’ y Salvador Barragán Camacho,
y en el presente los actuales dirigentes que han estado en esa organización por
muchos años y son millonarios”.
“El gasolinazo y mi tristeza, malestar,
deseos y sueños”
Sergio Aponte Polito,
General de División D.E.M. Retirado
De acuerdo a las garantías
que como mexicano me otorga la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, especialmente en su Artículo Sexto, Libertad de Expresión, me
permito hacer de su conocimiento algunas impresiones que me surgieron al enterarme
del alto y lamentable incremento en el precio de las gasolinas, “mega
gasolinazo”, con el que México inició el año 2017, siendo las siguientes:
TRISTEZA
La noticia me causó tristeza,
porque durante 49 años que estuve en el activo del Ejército Mexicano, recorrí
varias veces nuestro país por razones de estudio y trabajo, haciéndolo por vía
terrestre, aérea y marítima; por tal motivo, tuve la oportunidad de conocer los
grandes recursos naturales que existen en nuestro territorio nacional, pero debido a la mala administración, así como a
la corrupción, ineptitud e irresponsabilidad en la que han incurrido muchos de
los funcionarios federales, estatales o municipales, nuestro petróleo, gas,
recursos forestales, minerales y marítimos, no han sido debidamente aprovechados
en beneficio de la sociedad mexicana, sino que gran parte de estos recursos han
servido para que algunos políticos y empresarios nacionales y extranjeros se
enriquezcan, realizando fraudes, robos, engaños, sobornos, etcétera.
Tristeza, porque los
beneficios que se obtienen del petróleo en varias ocasiones han sido
desaprovechados o derrochados por funcionarios irresponsables, corruptos y
traidores a México; también el petróleo ha servido como garantía para que
nuestro país se endeude como en los años 70 u 80, cuando banqueros de
instituciones internacionales vinieron a México a ofrecer préstamos para
pagarse a largo plazo en dólares y con intereses bajos, pero no fijos, quedando
a criterio de los bancos subir estos intereses que convirtieron la deuda en un
grave problema para nuestro país, por la dificultad para pagarse; como sigue
siendo en la actualidad dicha deuda que, según los economistas, equivale al 51
por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y yo nunca me enteré dónde quedaron
esos enormes recursos.
Tristeza, porque han pasado
muchos años y la corrupción en Petróleos Mexicanos (Pemex) sigue prevaleciendo
a través de concesiones y contratos indebidos e ilegales, como lo acaba de
documentar un periodista del diario Milenio, y menciono otro caso de los
innumerables que existen, pero que nos ilustra de la enorme corrupción que ha
existido: el de los hermanos Bribiesca, hijos de la señora Marta Sahagún, que
ya son millonarios, dueños de grandes negocios, edificios y hasta de avión,
pero antes eran vendedores de legumbres en Irapuato y utilizaban una camioneta
de modelo no reciente para transportar sus productos, pero su entrada a los negocios
con Pemex, ayudados por su madre, los hizo millonarios.
Tristeza, por el uso de
recursos financieros para otros
propósitos ajenos a Pemex, principalmente de tipo político; robos de
combustibles que considero son distractores, propiciados en muchas ocasiones
por gente de alto nivel de esta empresa,
que sabe los lugares, hora y clase de combustible que va a pasar por
determinado lugar para ser sustraído
ilegalmente por bandas de delincuentes; también existe el sindicato de Pemex,
que ha sido nefasto por la corrupción y enriquecimiento en el que han incurrido
líderes como Joaquín Hernández Galicia “La Quina” y Salvador Barragán Camacho,
y en el presente los actuales dirigentes que han estado en esa organización por
muchos años y son millonarios.
Tristeza, porque el
gasolinazo, junto con el aumento de gas, luz y en algunos Estados, también el
agua y el Impuesto Predial, afectarán negativamente el bolsillo de los
mexicanos pobres, porque para los ricos y millonarios, será una distracción y
no una pesadilla como lo será para millones, que se notará claramente cuando
empiecen a subir los precios de los artículos de primera necesidad , porque los
dueños de los autotransportes pagarán más por los combustibles y ese aumento se
le cargará al comerciante, y este comerciante venderá más caro su producto al
consumidor, que es el pueblo.
También el ciudadano que no
es millonario, o cuando menos rico, resentirá cuando tenga que pagar más por un
boleto para viajar en avión o en
autobús, pagará más cuando tenga que viajar en taxi, comer en un
restaurante o ir al cine; por lo tanto, el gasolinazo sí será causa de
inflación alta y no como lo afirma el Secretario de Hacienda, José Antonio
Meade, que no afectará a las clases bajas, y si les afecta será poco. En el
sexenio pasado, otro Secretario de Hacienda y Crédito Público, el Senador,
Ernesto Cordero Arroyo, declaró que una familia
podía vivir bien con seis mil pesos, tener su casa, automóvil y hasta
pagar la colegiatura de sus hijos en escuelas particulares. ¡Estos políticos
viven en otro mundo! Nada más como ejemplo, en enero del presente año la
Escuela Bancaria Comercial de Querétaro aumentó 500 pesos el semestre, pasando
de 8 mil 860 a 9 mil 300 pesos mensuales.
MALESTAR
El gasolinazo me causó malestar porque fue aplicado en un
momento en que la sociedad ha sido afectada negativamente en su moral, economía
y bienestar, al estar recientes los siguientes eventos desagradables:
Ex gobernadores corruptos que
con muchos meses de anticipación fueron denunciados y no se hizo nada para
llevarlos a prisión y expropiar sus bienes, entre éstos se encuentran: Javier
Duarte de Ochoa, de Veracruz, acusado de uso indebido de recursos públicos por
35 mil millones de pesos, desvío de
recursos públicos por 14 mil millones de pesos; además, dejó una deuda pública
de 182 mil 895 millones de pesos.
César Duarte Jáquez, de
Chihuahua, acusado de desfalco público por 7 mil 207 millones de pesos, desvío
de recursos públicos por 80 mil millones de pesos, pagar una deuda pública con
recursos públicos por 4 mil millones de pesos
y dejar una deuda pública por 55 mil millones de pesos.
Roberto Borge Angulo, de
Quintana Roo, acusado de rematar el 10
por ciento de la reserva territorial del Estado a familiares y personas
cercanas, además de irregularidades en la cuenta pública por 25 mil 300 millones
de pesos.
Guillermo Padrés Elías, de Sonora,
acusado de desfalco público por 2 mil millones de pesos, lavado de dinero y
defraudación fiscal por 8 mil millones
de pesos; construyó una presa en un rancho de su propiedad y dejó una deuda
pública de 32 mil 538 millones de pesos. Es el único que está en la cárcel.
También hay gobernadores y
presidentes municipales que han recibido muchos millones de pesos para ser
empleados para beneficio de obras en sus respectivos estados y municipios, pero
en muchas ocasiones parte de estos
recursos públicos son desviados
para uso personal (guardar para campañas políticas, pagos para
comunicación social, compra de residencias, terrenos y ranchos en territorio nacional o en el extranjero,
así como cuentas bancarias en varios países; como ejemplos están algunos
gobernadores en funciones y no se hace nada).
Diputados y senadores que
tienen en sus dietas comisiones y prestaciones muy elevados, asimismo, se
otorgan bonos y aguinaldos que en conjunto sumaron, en diciembre de 2016, una
cantidad aproximada a 550 mil pesos por diputado o senador.
Diputados estatales que
aprueban las cuentas públicas sin revisar, para ganarse favores de los
gobernadores; también estos diputados se aumentan sus sueldos y prestaciones a
su complacencia.
Consejeros del Instituto
Nacional Electoral con altos salarios y prestaciones que, de igual manera, se
otorgan aguinaldos y bonos que en diciembre sumaron 650 mil pesos.
Magistrados integrantes de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación y de la Judicatura con altísimos
salarios, prestaciones, bonos y aguinaldos.
La mayoría de los miembros de
estos tres poderes también gozan de vales de gasolina, comedores y algunos
hasta gimnasio tienen, y los consejeros
del INE, de tanto dinero que se les da en el presupuesto, hasta se dan el lujo de
otorgarse teléfonos de última
generación. Posiblemente a estas personas se refirió el Secretario Meade cuando
afirmó que no iban a resentir la inflación por el gasolinazo; en cambio el
aumento al salario mínimo para el trabajador
fue de aproximadamente 7 pesos para quedar en 80. 20 pesos, que servirá
para pagar el aumento en transporte, luz, agua gas, renta de casa,
alimentación, vestuario, calzado, gastos de escuela… y dudo que quede algo para
diversión de la familia.
BUENOS DESEOS Y SUEÑOS
Primeramente deseo
equivocarme en mis estimaciones sobre los efectos negativos que tendrá el
aumento de las gasolinas, gas y agua en los bolsillos del pueblo de México y
que la inflación no será tan alta.
Sueño que para el próximo año
fiscal el presupuesto que envíe el Poder Ejecutivo a la Cámara de Diputados
para aprobación, sea más austero y que los diputados lo aprueben pensando que
el gasto de las cámaras de senadores y diputados no debe ser oneroso; con igual
criterio se procedería con los poderes Ejecutivo y Judicial, Instituto Nacional
Electoral, partidos políticos, así como
el destinado a los gobiernos de los Estados y municipios, que es donde mayor
control se necesita, todo esto para que el Gobierno Federal cuente con mayores
recursos para beneficio del desarrollo nacional.
Soñé que el funcionamiento de
Pemex se realizaba con honradez, eficiencia y transparencia para evitar la
corrupción y no derrochar los recursos que son necesarios para el desarrollo
nacional, además, se tomaba como ejemplo para otras dependencias.
Soñé que todas las
dependencias de los gobiernos Federal, estatales y municipales realizaban sus
funciones y trabajos con honestidad,
responsabilidad y eficiencia, asimismo, se disminuía notoriamente
la corrupción que tanto ha perjudicado
a México por la desconfianza y falta de inversión extranjera; por lo
tanto, ya no estábamos considerados como
uno de los países más corruptos del mundo.
Soñé que las autoridades
correspondientes realizaban
fiscalizaciones rígidas, eficientes y honestas de los recursos públicos, sobre
todo a las cuentas de gobernadores y presidentes municipales, para que éstos se
dedicaran a los fines programados y no
para beneficio de alguna o algunas autoridades.
Soñé que los ex gobernadores
de Veracruz, Chihuahua y Quintana Roo, ya habían sido capturados y estaban en
la cárcel cumpliendo condenas por muchísimos años por sus actos de corrupción,
así como uso indebido de recursos públicos, desvío y desfalco de recursos
públicos, rematar 10 por ciento de la reserva territorial del estado de
Quintana Roo, irregularidades en la cuenta pública… Además, soñé que estos
malos funcionarios, traidores al pueblo de México, ya no tenían padrinos que
los protegieran. Ese encarcelamiento serviría de advertencia a otros
funcionarios corruptos.
Un deseo especial que tuve
fue que la Cámara de Diputados realizaba sus actividades legislativas
únicamente con 400 diputados y no con
500; asimismo los diputados y senadores
legislaban a favor del pueblo de México,
que fue el que los eligió y no para un determinado partido político o
asociación determinada, destacando por su buena actuación legislativa los
diputados que fueron guerrilleros y luchadores sociales.
Un sueño hermoso que tuve se
refiere a que cuando le pidieron al pueblo de México “apretarse el cinturón”
ante los aumentos de gasolinas, luz y gas que provocará una fuerte inflación,
los diversos funcionarios y políticos en general decidieron solicitar voluntariamente
ya no requerir de altos sueldos, prestaciones, dietas, compensaciones, bonos,
aguinaldos y reparticiones “en lo oscurito”; por lo tanto, durante dos años
recibirían únicamente cinco salarios mínimos para vivir, todo lo anterior en
solidaridad con el pueblo de México.
Uno de mis sueños especiales
se refiere a que los funcionaros de diversos niveles, especialmente los
gobernadores junto con algunos de sus subordinados se turnaban para visitar las
comunidades rurales de nuestro país para darse cuenta personalmente de la
carencia de fuentes de trabajo que existe, de la falta de vías de comunicación
apropiadas, de que únicamente existen escuelas primarias, de que faltan centros
de salud, medicinas y personal médico,
de los servicios deficientes que hay de agua, luz, gas. Todo lo anterior para
que cada dependencia brindara el apoyo que se requiere.
Soñé que el señor Presidente
de los Estados Unidos Mexicanos y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, el
secretario de Hacienda y Crédito
Público, así como la Cámara de Diputados, consideraban los bajos salarios que tiene el personal
militar, principalmente la oficialidad y
la tropa, y se les otorgaba un aumento a sus haberes y raciones, ya que
muchas Policías tienen mejores salarios, y es el personal militar quien lleva
el mayor peso en las actividades contra el narcotráfico y delincuencia
organizada, lucha en la que el armamento, municiones, vehículos, equipo y
material diverso, sufre notorio desgaste.
Soñé que con el aumento que
se les daba, los soldados al estar en sus actividades en contra del
narcotráfico no tenían angustias al saber que sus familias ya no pasaban hambre
ni tenían que pedir prestado para alimentar a sus hijos.
Termino el presente escrito
con un poema del ilustre literato mexicano Amado Nervo, el cual es apropiado
para la ocasión:
“Mi México”
Nací de una raza triste,
de un país sin unidad
ni ideal de patriotismo.
Mi optimismo es tan solo voluntad,
obstinación en querer,
con todos mis anhelares,
un México que ha de ser
a pesar de los pesares,
Y que yo ya no he de ver.
(SIN EMBARGO.MX/ REDACCIÓN / ENERO 13, 2017 - 11:45
AM)