Fidel Herrera Beltrán es un
hombre con suerte. No solo por ser priista en un momento donde su partido
ejerce el poder desde la Presidencia de la República y hacia el resto de los
Poderes que integran el Estado Mexicano, sino porque en dos ocasiones de plano
se ha sacado la lotería.
Una vez fue con fecha
indefinida pues el ex Gobernador de Veracruz solo lo aceptó públicamente cuando
en 2008 ganó por segunda vez el premio mayor, entonces de 25 millones de pesos,
que –dijo él- repartió en cachitos -literalmente- entre amigos y peticionistas
que se le acercaron a solicitarle apoyo siendo él mandatario de aquel estado.
La lotería política también
se la ha ganado Fidel Herrera. Fue Gobernador de Veracruz de 2004 a 2010, es
decir era Mandatario y se sacó la lotería (1 probabilidad de 250 mil, por lo
menos).
Veracruz es uno de los
Estados más golpeados por la criminalidad, y más endeudados; acumula en los
primeros 32 meses de Enrique Peña Nieto 2 mil 244 ejecutados (de 57 mil 410
registrados en ese periodo en toda la República Mexicana) y una deuda
reconocida por Javier Duarte de Ochoa (el actual Mandatario) de 44 mil millones
de pesos.
Aunque de acuerdo a la
revista de finanzas y economía, Forbes, en el primer trimestre de 2015 Veracruz
ocupaba el deshonroso tercer lugar de la lista de los Estados con mayor deuda
pública con 49 mil 952 millones de pesos, solo antecedido por Nuevo León (61
mil 77 millones de pesos) y el Distrito Federal con 65 mil 765 millones de
pesos).
De esa deuda Fidel Herrera
Beltrán no es ajeno. Él entregó el poder a Javier Duarte de Ochoa, y lo hizo
con una deuda de unos 20 mil millones de pesos. De acuerdo a reportes
periodísticos de aquel Estado, en la agonía de su administración el Congreso
del Estado le autorizó una línea de crédito de diez mil millones de pesos que
se sumaron a los más de 9 mil millones que ya traía de deuda.
Fidel Herrera además apareció
en otra no muy honrosa lista. La realizada en 2013 por la periodista Dolia
Estevez y que tuvo como objetivo detectar a los 10 políticos más corruptos de
México. El listado lo encabezó la hoy presidiaria y ex dirigente del Sindicato
Nacional de los Trabajadores de la Educación, Elba Esther Gordillo Morales.
Herrera Beltrán ocupó la posición número 8.
La periodista Estevez
justificó la inclusión del ex Gobernador priista así: “…durante su
administración (2004-2010) las actividades criminales del cártel de Los Zetas
incrementaron. Hubo señalamientos de sus conexiones con los Zetas, que se
habrían dado en abril en Texas. Un agente del FBI testificó que Francisco
Colorado Cesa, un contratista de Pemex, había actuado como intermediario entre
Herrera y un miembro fundador de Los Zetas. Colorado Cessa fue procesado.
Supuestamente Herrera fue sobornado para permitir a Los Zetas operar
libremente. Herrera ha negado estas acusaciones y no está siendo investigado en
México. Reportes no confirmados indican que él podría ser enviado como
Embajador a Grecia”.
En efecto, Fidel Herrera
envío una carta a la revista Forbes para exigir que su nombre fuese eliminado
de la lista de los 10 políticos más corruptos –cuestión que no sucedió-
alegando que Colorado era un empresario y que el resto de la información no
tenía sustento, por tanto era falsa. En la página electrónica de la
norteamericana Forbes, el listado aun es visible.
Y Fidel Herrera no fue
enviado a Grecia en 2013, sino de Cónsul de carrera a Barcelona en 2015. El
Presidente Enrique Peña Nieto, decidió que el señalado ex gobernador era el
perfil más adecuado para representar a los mexicanos en aquel país. Aun con los
señalamientos, la deuda, el incremento de la inseguridad, heredados al no menos
descalificado Duarte de Ochoa; el priista que ha ganado en dos ocasiones la
lotería, que se precia de controlar un Estado que no ha perdido el PRI y de una
cercanía fraternal al Presidente Enrique Peña Nieto, fue enviado a Barcelona.
Periodistas de España han
reaccionado de la manera más lógica: impugnando públicamente las credenciales
de las cuales carece Herrera para ser representante en aquel País del Gobierno
mexicano.
Luego que el lunes 19 de
octubre de 2015 el priista sin experiencia en el servicio diplomático, sin
carrera en relaciones exteriores, ni formación consular, tomó posesión del
cargo como Cónsul de México en Barcelona, las reacciones en España fueron más
duras que las vertidas en México.
Primero porque dentro del
cinismo político que caracteriza a esta administración federal, de hacer y
tomar decisiones “legales” pero políticamente incorrectas, el Presidente, o su
nueva Secretaria de Relaciones Exteriores, la también inexperta ex Secretaria
de Turismo, Claudia Ruiz, le quitaron la categoría de Consulado General de
México en Barcelona, dejándolo solo como Consulado de México en Barcelona,
porque en el primer caso se requiere de la ratificación del Senado de la
República para el nombramiento, y en el segundo, solo el mandato del
Presidente.
Y no es que pensaran que el
Senado, solícito como es con Enrique Peña Nieto, no aprobaría el nombramiento
de Fidel Herrera como Cónsul General de México en Barcelona, sino porque, ante
el inminente nombramiento de dos Ministros de la Suprema Corte de Justicia de
la Nación en noviembre próximo, a partir de una terna enviada por el Presidente
a la Cámara de Senadores, las consignas sociales, las manifestaciones y el
rechazo a los –se asume- propuestos por el Presidente, se han mantenido en
alerta política.
Enviar el nombre de Fidel
Herrera Beltrán para ratificación en el Senado habría despertado otra serie de
manifestaciones de inconformidad, y evidenciado una vez más, el servilismo de
la Cámara Alta hacia los designios del Presidente. Y pues la situación en la
cancha presidencial no está para otro escándalo más debido a nombramientos más
por amiguismo, cuatismo o compadrazgo, que por capacidad y experiencia.
El diario español El País
determinó su posición editorial con una nota cuyo título se lee “Un polémico
exGobernador es el cónsul mexicano en Barcelona”, en el texto asentaron:
“El Consulado mexicano en
Barcelona es uno de los más importantes para México fuera de los que mantiene
en Estados Unidos. Herrera, que carece de experiencia diplomática, será el
encargado de gestionar los intereses de los mexicanos en Cataluña que, además,
atraviesa un proceso soberanista que ha desafiado su encaje en España”.
Es una desgracia para los
mexicanos que el Servicio Exterior, al igual que otros organismos de corte
autónomo o incluso la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se estén
integrando con priistas en el retiro, derrotados, denostados o simplemente sin
chamba. Aun cuando carezcan de la elemental experiencia que se solicita para
cualquier empleo, cargo o comisión.
El Gobierno de Enrique Peña
Nieto está acabando con el respeto que algunas instituciones todavía tenían.
Llenándolas de cuates y sospechosos comunes sin importar el gran daño que le
hace a nuestro México.
(SEMANARIO ZETA/ GENERALEZ/ ADELA
NAVARRO BELLO / FOTOS. INTERNET/ 21 DE
OCTUBRE DEL 2015 A LAS 12:02:37)