Continúa
la jornada de homicidios en Tijuana, destaca el caso del catedrático Antonio
Rodríguez Moreno y dos acompañantes, actualmente la PGJE realiza pruebas de ADN
a tres cuerpos carbonizado para determinar si corresponden a los hombres
desaparecidos. En la semana también fue detenido un policía municipal que
reclutaba operadores para un bando criminal. Y grupos delictivos intercambiaron
narcomensajes en las calles tijuanenses
El
sábado 5 de septiembre, a las nueve de la mañana, fue la última vez que el
tijuanense radicado en Mexicali, Juan Antonio Rodríguez Moreno, habló con una
de sus hermanas. Le dijo que iba rumbo a los terrenos propiedad de la familia
en la delegación La Presa de Tijuana, y que tenía una cita.
Explicó
que Eliú Quezada Ibarra lo contactó y tendría una reunión con él, detalló que
su interlocutor le había pedido verse porque quería un arreglo para el juicio
que tenían por las tierras que estaban visitando.
Este
litigio está consignado en el expediente 284/2004, llevado durante 11 años por
el Juzgado Primero de lo Civil, en el que Óscar Jaime Rodríguez, Luz María
Moreno Moreno y Joaquín Rodríguez Moreno (asesinado en 2008) disputan el predio
a Quezada.
Rodríguez
Moreno, de 67 años, catedrático de la
Facultad de Ciencias Administrativas de las universidades UABC y UNEA, había
salido de Mexicali con rumbo a Tijuana, en su tránsito a la propiedad familiar.
Lo acompañaron el ingeniero Martín Dimas Palafox Cervantes y el asistente de
este, Dionisio Arévalo. De acuerdo con lo dicho por las familias, iban a hacer
un deslinde de los predios propiedad de la familia Rodríguez, ubicados en el
Kilómetro 14.5 en Valle Bonito. Pero desaparecieron.
Entre
el domingo 6 y la mañana del 7 de septiembre, las familias los buscaron por su
cuenta y hablaron a todos los medios de comunicación para reportarlos como
extraviados y pedir apoyo para su localización. La tarde del lunes presentaron
la denuncia por desaparición ante la
Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
Durante
tres días y siete horas no se supo nada de ninguno de los tres, hasta el martes
8 de septiembre alrededor de las cuatro de la tarde, cuando quienes iban a
bordo del Pegaso, helicóptero de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal
de Tijuana -incluido un hijo del catedrático- avistaron una camioneta calcinada
en un escarpado cañón localizado en la propiedad de los Rodríguez.
En
el extremo opuesto del predio, desde las tres de la tarde, una veintena de
ministeriales hacían barrido, pero el trabajo desde el aire fue más rápido.
Resultó difícil para los elementos de las corporaciones llegar al auto.
La
ubicación del vehículo se reportó alrededor de las cuatro de la tarde y, poco
más de una hora, los oficiales confirmaron que se trataba de la camioneta Jeep
Grand Cherokee, modelo 2000, en la que circulaban los tres hombres desaparecidos,
el color original del auto no se podía identificar porque estaba completamente
quemada, en el interior solo se veían montones de cenizas, alambres y algunos
huesos.
En
el auto encontraron las placas BGA-80-15, a nombre de un miembro de la familia
de apellidos Cruz Rodríguez.
Tras
el hallazgo, la PGJE abrió la averiguación previa 342/15/201 por el homicidio de tres
individuos “desconocidos, completamente carbonizados”.
Al
costado derecho de la camioneta que
quedó clavada de frente en el barranco, uno o dos metros arriba quedaron
tirados mapas y documentos que correspondían al predio de los Rodríguez y que
estaban en posesión de los tres hombres, cuya desaparición fue denunciada ante
la PGJE la noche del 7 de septiembre.
También
cerca del vehículo localizaron un teléfono celular y varios botes de cerveza,
incluido uno cortado, el cual aseguraron para verificar si fue usado para echar
algún tipo de líquido acelerante de fuego
sobre el auto.
Así,
las autoridades confirmaron se trataba de la camioneta, pero ratificar la
identidad de las cenizas y huesos en ese momento era imposible, al requerir de
exámenes de ADN.
INVESTIGAN INCINERACIÓN PROVOCADA
Aunque
oficialmente no descartan la posibilidad de un accidente, los investigadores
consideran poco probable que la camioneta se haya desbarrancado mientras
circulaba.
Explicaron
que se aprecia que iba sobre el camino vecinal del Rancho Rodríguez, y el
barranco por donde rodó -en la escena se ven la huellas de las llantas- estaba
a 20 metros de distancia del camino.
Adicionalmente,
alrededor de la unidad fueron dejadas latas de cerveza, como si trataran de
sugerir que los de la camioneta iban bebidos, “pero por tomados que hubieran
ido -situación que no creen haya sucedido-, no hubieran perdido el camino por 20 metros.
“Además,
los documentos -del terreno- quedaron
afuera del auto, evidentemente los sacaron y los revisaron antes de que la
camioneta se incendiara”.
Un
elemento de otra corporación que estuvo en la zona agregó: “Otra situación que
no coincide con la posibilidad de un accidente es la pendiente, la inclinación
de la loma no pudo haber provocado que el carro explotara”. El auto rodó aproximadamente 100 metros
hacia el fondo.
VECINO EN LITIGIO
Como
parte de la indagatoria, el mismo día que localizaron el auto y los cuerpos
carbonizados, policías ministeriales se dirigieron al racho de Eliú Quezada
Ibarra. Las corporaciones operativas les informaron que en ese inmueble habían
atendido reportes de gente armada, pero cuando la gente de la PGJE arribó, no
había más que un velador dormitando.
De
Quezada, el único antecedente judicial público, adicional al pleito con los
Rodríguez, data de octubre de 2002. Empezó el día 2, cuando elementos de la
Procuraduría General de la República (PGR) catearon el salón de fiestas Adlai,
domiciliado en el fraccionamiento Murúa propiedad del hijo de Eliú, David
Quezada.
Lugar
en el que Rafael Loza Cruz, informante de la Administración para el Control de
Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) denunció que lo habían tenido
secuestrado una semana antes. El inmueble tenía sótano, un falso lavabo daba
acceso a túneles, así como salida por dos calles.
Como
seguimiento de la indagatoria, el 6 de noviembre, agentes federales ingresaron
al rancho El Caballo Blanco en el
Kilómetro 14.5 de la Carretera Libre Tijuana-Tecate, propiedad de Quezada
Ibarra. Reportes de la prensa indican que encontraron caballos, un oso negro,
tres leones, un tigre y una veintena de avestruces.
En
ninguno de los dos inmuebles localizaron a los propietarios. La PGR los señaló
públicamente por almacenamiento de estupefacientes y secuestro, sin embargo, no
hay registro de su detención.
Por
su parte, el Poder Judicial reporta dos amparos solicitados por Quezada Ibarra:
el número 852- 1/102.5/4215, promovido el 19 de diciembre de 2012 en el caso
del terreno; y el 1/0195/2001-III , iniciado en el Juzgado Octavo de Distrito.
DOS HERMANOS ASESINADOS
Joaquín
Rodríguez Moreno
Antes
de que el licenciado Juan Antonio Rodríguez Moreno hubiera estado involucrado
en una desaparición y posible homicidio violento, dos de sus hermanos fueron
abatidos a balazos.
Miguel
Ángel Rodríguez Moreno fue el primero de los hermanos cuyo cuerpo sin vida se
localizó en enero de 1988, era un ex ministerio público del Fuero Común en
Tijuana, conocido públicamente. Entre sus posesiones le encontraron
credenciales que lo acreditaban como empleado de la PGJE, a pesar de que había
renunciado a la institución.
Este
sujeto fue uno de los protagonistas de la nota “La mafia invade Baja
California”, publicada por Jesús Blancornelas en la edición de ZETA del 20 de
septiembre de 1985.
En
el texto se redactó la historia de un operativo militar que terminó con la
captura de dos agentes de la PGJE -Juan José Padilla y Jesús Martínez
Colmenares-, quienes confesaron proteger almacenes de droga en las colonias
Libertad, Cacho y Cerro Colorado, todo por órdenes de su jefe Rodríguez Moreno.
Se
detalla cómo en septiembre de 1985, Miguel Ángel Rodríguez Moreno se presentó
personalmente en una bodega ubicada en el número 528 de la calle Aquiles Serdán
en la colonia Libertad, para evitar que dos agentes federales que se toparon
incidentalmente con el negocio ilícito, lo denunciaran.
Rodríguez
era amigo y socio en el despacho de abogados de Edgardo Leyva Mortera, hermano
del entonces gobernador Xicoténcatl Leyva Mortera y, según los ministeriales
detenidos, traficaban droga hacia Estado Unidos y recibían de 2 mil a 3 mil
dólares por mes por cuidar las bodegas, y hasta 50 mil dólares por dejar ir a
traficantes detenidos con droga. La mayoría iba a los bolsillos de Manuel
Rodríguez. Entonces hubo una orden de presentación en su contra, pero cruzó a
Estados Unidos y la evadió.
A
Joaquín Rodríguez Moreno lo asesinaron a balazos la tarde del viernes 13 de
junio de 2008, cuando llegaba a una reunión de la Confederación Nacional
Campesina en un restaurante ubicado en la Zona Centro de Mexicali.
Baja
California durante el quinquenio estatal encabezado por el priista Leyva
Mortera, recibió dos balazos en la cabeza después de bajar de un pick-up Ford
modelo 1999 donde viajaba como copiloto.
De
acuerdo con testigos, el agresor ni siquiera corrió, enfiló caminando hacia el
Oriente por el callejón Reforma, en el camino se dio un tiempo para arrojar el
arma -una pistola calibre 45 milímetros- en el techo de una de las viviendas.
Rodríguez
Moreno participaba en la Comisión Estatal Electoral de la liga campesina,
representando al comité municipal de la CNC por Playas de Rosarito.
El
domingo 15 estaban programada la elección del líder estatal cenecista, por lo
que la comisión electoral donde participaba Joaquín Rodríguez Moreno sesionó
ese viernes por la mañana en el local de la liga campesina ubicada a un lado
del PRI estatal, por el Bulevar López Meteos, en la zona cercana al Centro
Cívico. Después del mediodía los integrantes del comité electoral optaron por
trasladarse al restaurant BIC –ubicado por Calle Peritus y Callejón Reforma-,
frente a la escuela de Bellas Artes.
El
restaurant BIC es un lugar frecuentado por priistas de la vieja guardia, ya que
anteriormente las oficinas estatales del Partido Revolucionario Institucional
se ubicaban en la parte alta del viejo Mercado Municipal, casi contra esquina
del establecimiento.
El
ex funcionario educativo -también fue director del CONALEP Puebla- quedó tirado
en el pavimento, en posición fetal y gravemente herido. Así permaneció por
cerca de media hora hasta que llegó la ambulancia que lo trasladó al hospital
Privado Al Mater, donde falleció minutos después.
Por
el crimen no hubo detenidos, y en los diarios mexicalenses no hubo ninguna
esquela relacionada con el deceso del ex funcionario.
MÁS VÍCTIMAS DE HOMICIDIO
Pero
la escalada en la inseguridad va más allá de los homicidios en Tijuana. Con 68
asesinatos en la ciudad, agosto fue uno de los meses más violentos de este
2015, sin embargo, las autoridades contabilizaron un total de 168 eventos
delictivos donde hubo presencia de armas de fuego, y 100 incidentes que fueron
desde personas lesionadas con pistolas hasta asaltos.
Diez
asesinatos se han cometido en los primeros diez días de septiembre, 13 si se
suman los restos carbonizados que se localizaron el 8 de septiembre en el
interior de una camioneta incinerada, en el fondo de un barranco en Valle
Bonito.
Nueve
de los homicidios fueron cometidos en esta semana que termina. El viernes 4,
antes de las tres de la tarde, un hombre armado, con gorra y capucha negra, ingresó
al negocio Granito Express del fraccionamiento El Lago; entró directo y le
apuntó a la cabeza del dueño, Víctor Manuel Salazar Rueda. El video deja ver
que al tratar de disparar el arma se le encasquilló, y se echó para atrás,
entonces la víctima tomó una silla plegable e intentó golpearlo, pero el matón
ya había tirado el casquillo atorado y vuelto a cargar el arma.
Cuatro
tiros hicieron blanco en Salazar, uno en la cabeza. Falleció en un hospital
particular. No tenía antecedentes delictivos.
El
auto Toyota Corolla placas 3NNE109 del Estado de California y usado por los
agresores, fue localizado en un cajón de
estacionamiento de Plaza Insurgentes.
El
lunes 7 de septiembre las autoridades levantaron el cadáver putrefacto de un
hombre no identificado con un tubo en la cabeza, lo dejaron tirado en un camino
vecinal en las inmediaciones del Puente La Encantada, a 500 metros del Bulevar
2000.
El
martes 8 de septiembre, entre dos y tres de la tarde, encontraron los tres
cuerpos carbonizados y, pasadas las diez de la noche, la PGJE fue informada del
fallecimiento de Jorge Javier Lliles Ortiz, baleado en el interior de su casa
en la colonia Obrera segunda sección.
El
mismo miércoles, reportaron otros tres asesinatos por la mañana. El cadáver de
un hombre baleado fue levantado en Pórticos de San Antonio, otro en la colonia
Chihuahua y el tercero en la canalización del Río, a la altura del Puente
Benton.
POLICÍA MUNICIPAL DETENIDO
Como
parte de los operativos de la autoridad, el 3 de septiembre, después de que sus
secuaces balearon a un hombre en la colonia Independencia, fue detenido Miguel
Antonio Serrano Juárez “El Vampi”, policía municipal activo con diez años de
antigüedad.
Al
ser detenido estaba asignado al
Operativo Confianza en Zona Centro, antes estuvo en la delegación La Presa,
pero lo reubicaron porque fue señalado de tener ligas con narcomenudistas de la
zona.
Según
declaraciones de sus cómplices, Roberto Ruiz y Mauricio Cervantes, no sabían que “El Vampi” era policía, solo
que era su jefe ,“muy discreto”, y agregaron: “Ese güey mueve las conectas en
Valle Verde” y les ofreció dinero para “sentar a un bato en la Independencia”
Los
primeros dichos del detenido y sus cómplices ubican al policía como
“reclutador”; le pagaba a uniformados en las diversas delegaciones para que
pasaran información respecto a los
operativos; y cuando necesitaba algún otro tipo de actividad criminal, iba por
algunos delincuentes y les ofrecía dinero, fuera para mover droga o matar a un
rival.
De
inicio Serrano quedó consignado por narcomenudeo, porque el juez Segundo negó
la “orden de aprehensión urgente” por el
homicidio por el cual se le detuvo. En sus primeras declaraciones terminó por
aceptar que pagaba a policías y criminales por actividades delictivas. Que incluso
su “jefe” mafioso -a quien no identificó-
le pagaba una cantidad por cada narcomenudista rival que detenía, él o
los policías a los que reclutaba. Pero aseguró que nunca ha asesinado.
ENFRENTAMIENTO CON NARCOMENSAJES
Adicionalmente,
en el transcurso de la semana guindaron en diversos puentes de Tijuana, por lo menos cuatro mantas con mensajes de
amenazas entre cárteles, en los que informaron públicamente los nombres de
presuntos criminales. También pretendieron evadir su responsabilidad en el clima
de violencia, asegurando que las muertes involucran solo a gente ligada a las
actividades delictivas.
El
4 de septiembre, en un puente sobre el Bulevar Insurgentes, el mensaje fue
presuntamente del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y de nuevo expusieron
los nombres de algunos supuestos miembros del Cártel de Sinaloa que, según
ellos, están matando o secuestrando inocentes. La manta estaba escrita a mano
con palabras amontonadas y errores de ortografía. Decía así:
"MARCO TULIO CARRILLO GRANDE “ EL MARLON”
EX MUNICIPAL LUGARTENIENTE DEL “AKILES”,
LUIS FRANCISCO LOZANO BELTRAN ALIAS “EL
LICO” O “EL PAKITO” JEFE DE SICARIOS DEL AKILES, VICTOR HUGO MEJIA LOPEZ “EL
GRIEGO” O “EL YOGURT” o “CHECO” ESCOLTA Y JEFE DE SICARIOS DEL AKILES, JUAN
ENRIQUE ROCHIN CERVANTES “EL PETERPAN” o “FELIPIN” ENCARGADO DE BATAKAS, DAVID
HERNANDEZ MENDEZ “EL FADERS” , SICARIO Y SECUESTRADOR DE LAS SOBRINAS DEL MAYO
ZAMBADA AL SERVICIO DEL PETER, RAUL MIRANDA ORDAZ “EL ALEJO” O “EL RULAS”, JEFE
DE VARIAS CELULAS CRIMINALES AL SERVICIO DEL AQUILES, JUAN CARLOS DOMINGUEZ
PARRA “300 o EL CHUECO” o “JAIVA”.
PINCHES LACRAS SECUESTRADORES “AKI ES
CABRON CON CABRON NO INOCENTES USTEDES TAMBIEN TIENEN FAMILIA RESPETEN PUTOS NO
SEAN MUGROSOS SI SIGUE CORRIENDO SANGRE DE INOCENTES LES REGRESAREMOS LA
CORTESIA AKI EN LA TIA JUANA, EL CIELO ES COLOR PERLA, FUERA DE LA PLAZA RATAS
TRAICIONERAS Y SECUESTRADORES NOSOTROS AYUDAMOS A LA GENTE Y NO LA ROBAMOS NI
SECUESTRAMOS MUCHO MENOS COBRAMOS PISO NO VIVAN DE LO QUE LA GENTE GANA CON
ESFUERZO RATAS MUERTOS DE HAMBRE.
TIJUANA TIENE NUEVO DUEÑO “SR
MENCHO CTNG Y CJNG” PURO TIJUANA"
Cinco
días después, el 9 de septiembre, fueron colgadas tres narcomantas, una en el puente Lázaro
Cárdenas, otra en el peatonal en el Parque Morelos, y una más en el
fraccionamiento Soler.
Estaba
hecha como en taller de serigrafía, todo en mayúsculas sin acentos, y en la
parte inferior tenía una madera para evitar que se doblara con el viento y se
leía:
“CARTELES DE OTROS ESTADOS, SEGUIREMOS
TUMBANDO INTRUSOS COMO LO HEMOS ESTADO HACIENDO HASTA AHORITA, MAÑA CONTRA
MAÑA, LISTOS PARA CONTINUAR CON LA PELEA, LA LIMPIA ES PARA TRAER EL ORDEN A LA
CIUDAD, FIRMA EL C.A.F.
Mientras
que otro cartel advertía: “TIJUANA NO
TIENE NUEVO DUEÑO, ES EL CARTEL ARELLANO, DEJEN DE ILUSIONAR Y DE QUERER
ENGAÑAR A LA GENTE LA PLAZA ES DOMINADA POR GENTE NATIVA DE TIJUANA, NO POR
CARTELES DE OTROS ESTADOS, SEGUIREMOS TUMBANDO INTRUSOS COMO LO HEMOS ESTADO
HACIENDO HASTA AHORITA, MAÑA CONTRA
MAÑA, LISTOS PARA CONTINUAR CON LA PELEA, LA LIMPIA ES PARA TRAER EL ORDEN A LA
CIUDAD, FIRMA EL C.A.F.”.
Por
estos hechos de averiguaciones previas que no tienen avances, solo el
secretario de Seguridad del Estado, Daniel de la Rosa Anaya, mencionó ante la
prensa que no se puede dar validez a la información contenida en este tipo de
mensajes.
Ayer jueves 10 de septiembre se informó
extraoficialmente que otra manta había sido colgada frente a la Macroplaza.
ZETA se comunicó a la PGJE y a las secretarías de Seguridad del Estado y de
Tijuana, y en las tres instancias aseguraron desconocer el hecho, además de
negar que su personal hubiera retirado el mensaje criminal del puente.
ABANDONAN TRES VEHÍCULOS CON DROGA
A
unos metros de cruzar a Estados Unidos, en la Garita de San Ysidro, fue
abandonada una camioneta con 27 kilos de marihuana, envueltos en 22 paquetes,
aproximadamente a las nueve de la mañana del jueves 10 de septiembre.
La
unidad pick-up Chevrolet, con planas americanas 93164B1, estaba sobre uno de
los carriles izquierdos del cruce internacional, del lado mexicano.
De
acuerdo con las primeras pesquisas, se observó a dos hombres descender del
vehículo, quienes se retiraron del lugar por el Puente México.
En
otra acción, se decomisaron 320 kilos de cristal en el interior de una
camioneta Grand Cherokee de color negro y placas americanas.
El
viernes 4 de septiembre, a las 3:30 pm, elementos de la Base de Operaciones
Mixtas BOM, realizaban un recorrido de rutina en El Salado, en la delegación
Colonet del municipio de Ensenada, cuando observaron el vehículo estacionado.
Al
efectuar la revisión encontraron droga conocida como cristal, de un peso de
320.46 kilogramos; eran 405 recipientes y 82 bolsas de plástico.
El
enervante y la unidad quedaron a disposición del Ministerio Público de la
Federación.
En
otro automóvil abandonado en el estacionamiento de Plaza Monarca, Delegación
Cerro Colorado en Tijuana, fueron localizados el 9 de septiembre, 25 paquetes
de marihuana, que en total sumaron 100 kilos.
Al
ser revisado por elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la
Procuraduría General de la República, el auto, aparcado en el centro comercial
desde el día anterior, tenía en su interior envoltorios de droga en el
maletero, los cuales se entregaron al Ministerio Público de la Federación.
Asimismo,
en la colonia Chapultepec Alamar, elementos de la Policía Estatal Preventiva y
del Ejército decomisaron 449.014 kilogramos de marihuana.
El
viernes 4 de septiembre fue detenida una pareja a la que se incautaron 71.15
kilogramos de marihuana y un vehículo.
Según
la versión de la PGR, los detenidos, Rodrigo Barraza Olivas, de 27 años de
edad, fue sorprendido subiendo el enervante a un vehículo Toyota estacionado
sobre el Andador Canal, del referido asentamiento. A bordo de la unidad se
ubicó a Alejandra Mireya Arratía Vela, de 29 años.
Posteriormente,
el lunes 7 de septiembre, al practicarse oficialmente la diligencia de cateo en
el domicilio de la pareja, se localizaron 377.864 kilogramos del mismo tipo de
droga en un sótano.
El
9 de septiembre, mil 315 kilogramos de marihuana fueron localizados en el doble
fondo de un tracto camión procedente de San Luis Río Colorado, Sonora, con
destino a Tijuana, en el que se transportaban tubos de PVC.
El
mismo día, en el compartimiento hechizo de un bote estacionado en la costa de
San Diego, California, se decomisaron 95 paquetes con 220 kilogramos de
marihuana y se capturó a tres personas de nacionalidad mexicana, uno de ellos
con residencia permanente en Estados Unidos. También les aseguraron 290 mil
dólares.
CONFISCAN ARSENAL
Con
armamento y droga fue capturado el 3 de septiembre, Joel Pérez Delgadillo, de
30 años de edad, en la colonia Loma
Dorada de Tijuana. Lo presentaron por posesión de siete armas tipo fusil AR-15, calibre .223;
además de 650 cartuchos, 600 de calibre .223 y 50 de .25 milímetros.
En
el vehículo también se encontraron 6.74 kilos de cristal y 150 gramos de
cocaína.
Armamento,
droga y detenido, quedaron a disposición de la Agencia del Ministerio Público
del Fuero Federal.
EJECUCIONES Y ATAQUES ARMADOS DEJAN
HERIDOS
Entre
el viernes 4 y el jueves 10 de septiembre, seis personas resultaron heridas en
cinco ataques armados ocurridos en Tijuana.
Un
presunto narcomenudista de apodo “El Yogui” recibió disparos en el antebrazo
derecho y en el tórax, cuando se encontraba en el patio de una vivienda en la
colonia Cañadas del Florido en Tijuana, la tarde del viernes 4 de septiembre.
De
acuerdo a información oficial, el hombre de 36 años de edad estaba en un
domicilio ubicado en las calles Durazno y Privada Chabacano de la colonia
ubicada en la delegación La Presa.
Las
corporaciones policiacas atendieron el reporte alrededor de las 5:20 pm. Tras
recabar información, supieron que antes de los hechos, al hombre herido lo
acompañaban un hombre y una mujer, quienes se dieron a la fuga. Por lo que
después de un operativo, ambas personas fueron detenidas a bordo de una
camioneta Ford Windstar de color verde, sobre el Bulevar Las Fuentes, también
en la Zona Este de la ciudad.
Cerca
de la medianoche del martes 8 de septiembre, Aliza Gómez Tejeda resultó herida
cuando asesinaron a su pareja sentimental, Jorge Javier Lliles Ortiz en una
cuartería de la colonia Obrera segunda sección, perteneciente a la delegación
San Antonio de los Buenos.
La
joven de 29 años de edad fue atendida por paramédicos y trasladada al Hospital
General, donde se encuentra en estado crítico de salud y por lo cual no ha
podido declarar ante los agentes del Ministerio Público sobre los hechos.
Horas
antes, alrededor de las ocho de la noche, un reporte hecho a la central de
emergencias informó de dos hombres con heridas por impactos de bala en el
fraccionamiento Valle de las Palmas. El ataque ocurrió en las inmediaciones de
los establos ubicados en los caminos rurales de la Zona Este.
Uno
de los heridos presentaba dos impactos de bala en la pierna derecha, la otra
víctima tenía una herida en la pierna y dos más en el pecho, por lo que su
estado de salud se reportó como grave.
A
las 8:45 am del miércoles 9 de septiembre, paramédicos de la Cruz Roja
acudieron a la subdelegación Los Pinos para atender el reporte de un hombre
herido, quien fue llevado al Hospital General. La salud de la víctima de 35
años fue reportada como grave.
Mientras
que a las 11:00 am del jueves 10 de septiembre, Juan Luis Juárez resultó
lesionado por un impacto de arma de fuego frente al gimnasio Sports World, a
unos metros de los Juzgados Penales Federales y de la delegación de la PGR en
la Zona Río de Tijuana.
Según
información recabada por los investigadores, el presunto responsable huyó
corriendo del lugar mientras sostenía en su mano la pistola con la cual realizó
el ataque.
(SEMANARIO
ZETA/ REPORTAJEZ/ Investigaciones ZETA / Fotos. Cortesía/ 14 de Septiembre del 2015 a las 20:55:14)